En el marco de la crisis que viven las empresas inmobiliariarias norteamericanas, son precisamente los sectores de turismo e inmobiliario los que se perfilan como de mayor dinamismo en los próximos años por parte de la inversión española en México. Las empresas españolas de ese ramo invertirán cuantiosos recursos en México, los cuales irán acompañados de su gran experiencia en el desarrollo de vivienda familiar como primera opción, y luego de casas de descanso.