Sobre el papel, Atenas era más poderosa que Esparta y estaba mejor preparada para soportar un conflicto de larga duración. La capital del Ática no sólo poseía una economía más desarrollada y una población más elevada, sino que contaba con los inmensos recursos que ponían a su total disposición sus aliados de la Liga de Delos, más numerosos y ricos que los amigos de Esparta en la Liga del Peloponeso.
Comentarios
No dice nada que no sea ya bien conocido.
Básicamente, por subnormales.
(El 1% de la población era la pensadora).