Publicado hace 10 años por japego a legadohistoria.blogspot.com.es

En una epístola del 1492 que Pere Miquel Carbonell (1434 – 1517), archivero real de Barcelona, dirigió a una compañero Bartolomeu Veri en la que le narra el atentado que sufrió Fernando el católico en Barcelona el 7 de abril de 1492 y la condición y suplicio del regicida, Juan Canyamás. Pere Carbonell no presenció el atentado por hallarse trabajando en esos momentos en el Archivo, cuya fachada da a la plaza, y oyó el rumor atropellado de la gente ante el grave acontecimiento y corrió raudo al contiguo palacio real, dónde pudo enterarse de todo.

Comentarios

D

De aquellos lodos estos barros. lol