¿Existe una fórmula mágica de la sabiduría para que todos pueden llegar a ser sabios algún día? Recientemente, el periodista y escritor Stephen Hall, que estudia la intersección de la ciencia, la cultura, la tecnología y la política, visitó Carnegie Mellon para compartir lo que había aprendido hasta ahora sobre la ciencia de la sabiduría. [TRADUCCIÓN EN #1]
¿Qué es la sabiduría? ¿Es la madurez, o la inteligencia, o una combinación de rasgos diferentes? ¿Qué hace a una persona sabia? La gente asocia la sabiduría con características diferentes, y en general a alguien que es sabio se le considera como un modelo a seguir - alguien a quien se puede acudir en busca de respuestas. Aunque la definición de la sabiduría no está clara, muchas personas se esfuerzan en definirla pesar de no saber exactamente qué es. ¿Existe una fórmula mágica de la sabiduría para que todos pueden llegar a ser sabios algún día? Recientemente, el periodista y escritor Stephen Hall, que estudia la intersección de la ciencia, la cultura, la tecnología y la política, visitó Carnegie Mellon para compartir lo que había aprendido hasta ahora sobre la ciencia de la sabiduría.
En el marco de las Conferencias Universitarias 2011, Hall dio una charla titulada "La ciencia de la Sabiduría", que se centró principalmente en su viaje para descubrir las bases neurológicas y psicológicas de la sabiduría. Hall comenzó este proyecto en 2006, cuando recibió el encargo de su editor en la revista New York Times.
"La ciencia de la sabiduría suena un poco como un oxímoron. La sabiduría es un tema inmenso, obviamente - es algo que la gente ha hablado y discutido durante milenios, y es difícil hablar o escribir sobre ello porque significa tantas cosas según diferentes personas ", explicó Hall, señalando que fue inicialmente difícil iniciar la investigación de un tema que no estaba claramente definido.
A pesar de la ambigüedad de cómo la sabiduría se definió, Hall fue capaz de encontrar puntos comunes entre las diferentes escuelas de pensamiento con respecto a la sabiduría. Muchos científicos se referían a cómo las personas tratan con la incertidumbre, el cambio, e inesperadas "sorpresas" que la vida puede arrojar. Otros rasgos comunes que Hall obtuvo observando diferentes estudios fueron ser emocionalmente equilibrados, comprender el punto de vista de los demás, tener la capacidad de enmarcar los problemas a fin de exponer soluciones alternativas y tener un sentido de justicia moral y social.
A partir de estos puntos en común, Hall formuló lo que él denomina los "Ocho Pilares de la Sabiduría". De acuerdo con su libro publicado el año pasado, “Sabiduría: De la Filosofía a la Neurociencia”, estos ocho "pilares" son regulación de la emoción, la compasión, el juicio moral, la humildad, el altruismo, la paciencia, el buen juicio, y hacer frente a la incertidumbre.
"Ser emocionalmente equilibrado afecta a las decisiones que tomas. La compasión no es sólo un sentimiento hacia otra persona, sino también comprender el punto de vista de otra persona, que a su vez, constituye el tipo de decisiones que tomas", explicó Hall, indicando que estos ocho pilares no tienen fronteras estrictas entre ellos y pueden solaparse y afectarse entre sí.
No todos están de acuerdo con la búsqueda de Hall para obtener la definición acerca de la sabiduría. De acuerdo con The New York Times Book Review dos semanas antes de su libro “Sabiduría: De la Filosofía a la Neurociencia ", “En la era moderna, sin embargo, los filósofos habían abandonado en gran medida estas investigaciones. Hall parece no darse cuenta de esto.... No es que los filósofos sean intimidados o aburridos por la sabiduría. Por el contrario, han concluido que no hay un equilibrio único de los elementos que constituye "la buena vida para el hombre”, y por lo tanto, ningún valor unitario que la sabiduría nos pueda ayudar a maximizar."
Un estudio interesante que Hall encontró fue esencial en el cruce de la sabiduría y la neurociencia. Científicos de la Universidad de Wisconsin-Madison, midieron la actividad cerebral de un monje budista durante la meditación. Lo hicieron colocando un dispositivo en la cabeza del monje que recogía datos de su electroencefalograma, lo que esencialmente registra la actividad eléctrica producida por el cerebro en tiempo real. La actividad cerebral se grabó durante varias intensidades de meditación.
Los resultados, publicados en las Actas de la Academia Nacional de Ciencias, mostraron que la actividad del cerebro correlaciona bien con los distintos niveles de la meditación realizados por el monje budista, lo que sugiere que el entrenamiento mental implica cambios significativos en la actividad neuronal. Los resultados también mostraron esperanza para un futuro trabajo a realizar respecto a la actividad mental utilizando como "expertos mentales" a los monjes budistas como un sistema modelo de procesos cognitivos de alto nivel.
Sin embargo, obtener una medida más precisa de la "sabiduría" de una persona se ha puesto en tela de juicio en la revisión del Times. "Los juicios subjetivos de la sabiduría, por el contrario, son muy poco fiables .... Si crees que eres sabio, probablemente seas un tonto."
Hall señaló que en el pensamiento acerca de la sabiduría, los distintos grupos de investigación que han pasado años estudiando la ciencia que hay detrás de ella han ayudado a impulsar y promover el conocimiento sobre la memoria humana; si uno considera lo que se conocía acerca de la memoria hace algunos años una y lo compara con la comprensión actual, el cambio es inmenso. Hall sostuvo que estas cosas podrían no haberse aprendido nunca si no hubiéramos comenzado a explorar la ciencia de la sabiduría.
Hall también subrayó la importancia de detenerse y pensar en curiosidades parecidas a la sabiduría. En lo que respecta al actual estado "conectado" de la sociedad, en el que la mayoría de las personas están constantemente navegando por Internet y recibiendo grandes cantidades de información, Hall planteó la pregunta retórica: "¿Hay un lugar para la sabiduría en nuestro mundo moderno?, y si [no], ¿cómo podemos crear el espacio para ello?"
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TRADUCCIÓN:
¿Qué es la sabiduría? ¿Es la madurez, o la inteligencia, o una combinación de rasgos diferentes? ¿Qué hace a una persona sabia? La gente asocia la sabiduría con características diferentes, y en general a alguien que es sabio se le considera como un modelo a seguir - alguien a quien se puede acudir en busca de respuestas. Aunque la definición de la sabiduría no está clara, muchas personas se esfuerzan en definirla pesar de no saber exactamente qué es. ¿Existe una fórmula mágica de la sabiduría para que todos pueden llegar a ser sabios algún día? Recientemente, el periodista y escritor Stephen Hall, que estudia la intersección de la ciencia, la cultura, la tecnología y la política, visitó Carnegie Mellon para compartir lo que había aprendido hasta ahora sobre la ciencia de la sabiduría.
En el marco de las Conferencias Universitarias 2011, Hall dio una charla titulada "La ciencia de la Sabiduría", que se centró principalmente en su viaje para descubrir las bases neurológicas y psicológicas de la sabiduría. Hall comenzó este proyecto en 2006, cuando recibió el encargo de su editor en la revista New York Times.
"La ciencia de la sabiduría suena un poco como un oxímoron. La sabiduría es un tema inmenso, obviamente - es algo que la gente ha hablado y discutido durante milenios, y es difícil hablar o escribir sobre ello porque significa tantas cosas según diferentes personas ", explicó Hall, señalando que fue inicialmente difícil iniciar la investigación de un tema que no estaba claramente definido.
A pesar de la ambigüedad de cómo la sabiduría se definió, Hall fue capaz de encontrar puntos comunes entre las diferentes escuelas de pensamiento con respecto a la sabiduría. Muchos científicos se referían a cómo las personas tratan con la incertidumbre, el cambio, e inesperadas "sorpresas" que la vida puede arrojar. Otros rasgos comunes que Hall obtuvo observando diferentes estudios fueron ser emocionalmente equilibrados, comprender el punto de vista de los demás, tener la capacidad de enmarcar los problemas a fin de exponer soluciones alternativas y tener un sentido de justicia moral y social.
A partir de estos puntos en común, Hall formuló lo que él denomina los "Ocho Pilares de la Sabiduría". De acuerdo con su libro publicado el año pasado, “Sabiduría: De la Filosofía a la Neurociencia”, estos ocho "pilares" son regulación de la emoción, la compasión, el juicio moral, la humildad, el altruismo, la paciencia, el buen juicio, y hacer frente a la incertidumbre.
"Ser emocionalmente equilibrado afecta a las decisiones que tomas. La compasión no es sólo un sentimiento hacia otra persona, sino también comprender el punto de vista de otra persona, que a su vez, constituye el tipo de decisiones que tomas", explicó Hall, indicando que estos ocho pilares no tienen fronteras estrictas entre ellos y pueden solaparse y afectarse entre sí.
No todos están de acuerdo con la búsqueda de Hall para obtener la definición acerca de la sabiduría. De acuerdo con The New York Times Book Review dos semanas antes de su libro “Sabiduría: De la Filosofía a la Neurociencia ", “En la era moderna, sin embargo, los filósofos habían abandonado en gran medida estas investigaciones. Hall parece no darse cuenta de esto.... No es que los filósofos sean intimidados o aburridos por la sabiduría. Por el contrario, han concluido que no hay un equilibrio único de los elementos que constituye "la buena vida para el hombre”, y por lo tanto, ningún valor unitario que la sabiduría nos pueda ayudar a maximizar."
Un estudio interesante que Hall encontró fue esencial en el cruce de la sabiduría y la neurociencia. Científicos de la Universidad de Wisconsin-Madison, midieron la actividad cerebral de un monje budista durante la meditación. Lo hicieron colocando un dispositivo en la cabeza del monje que recogía datos de su electroencefalograma, lo que esencialmente registra la actividad eléctrica producida por el cerebro en tiempo real. La actividad cerebral se grabó durante varias intensidades de meditación.
Los resultados, publicados en las Actas de la Academia Nacional de Ciencias, mostraron que la actividad del cerebro correlaciona bien con los distintos niveles de la meditación realizados por el monje budista, lo que sugiere que el entrenamiento mental implica cambios significativos en la actividad neuronal. Los resultados también mostraron esperanza para un futuro trabajo a realizar respecto a la actividad mental utilizando como "expertos mentales" a los monjes budistas como un sistema modelo de procesos cognitivos de alto nivel.
Sin embargo, obtener una medida más precisa de la "sabiduría" de una persona se ha puesto en tela de juicio en la revisión del Times. "Los juicios subjetivos de la sabiduría, por el contrario, son muy poco fiables .... Si crees que eres sabio, probablemente seas un tonto."
Hall señaló que en el pensamiento acerca de la sabiduría, los distintos grupos de investigación que han pasado años estudiando la ciencia que hay detrás de ella han ayudado a impulsar y promover el conocimiento sobre la memoria humana; si uno considera lo que se conocía acerca de la memoria hace algunos años una y lo compara con la comprensión actual, el cambio es inmenso. Hall sostuvo que estas cosas podrían no haberse aprendido nunca si no hubiéramos comenzado a explorar la ciencia de la sabiduría.
Hall también subrayó la importancia de detenerse y pensar en curiosidades parecidas a la sabiduría. En lo que respecta al actual estado "conectado" de la sociedad, en el que la mayoría de las personas están constantemente navegando por Internet y recibiendo grandes cantidades de información, Hall planteó la pregunta retórica: "¿Hay un lugar para la sabiduría en nuestro mundo moderno?, y si [no], ¿cómo podemos crear el espacio para ello?"
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