La provocación ha desaparecido del repertorio cromático barceloniano, hoy tan risueño y Rusiñol. Una silueta hambrienta, un cadáver con moscas, incluso un modesto pene, hubieran incomodado a los reyes, banqueros, promotores inmobiliarios, secretarios generales de la ONU, zapateros y ministros que han ovacionado entusiastas la redecoración ginebrina. La única mención explícita en la cúpula de Barceló a los derechos humanos, a las dictaduras y a la pobreza figura en el precio.
Comentarios
Más basura demagógica que habla del dinero que se le ha quitado (mentira) a los pobres negritos. Bah...
Mordaz e inteligente crítica, no sólo a la cúpula de Miquel Barceló, sino también a los últimos acontecimientos de su trayectoria artística.
Otro que ya ha triunfado más de lo digerible... a por él!
El deporte nacional en su maxima expresion!
#1: Doy fe.