Ayer se disputaron los partidos de vuelta de la promoción de ascenso de cadetes y en el último los jugadores del Valsequillo fueron salvajemente agredidos cuando celebraban el gol que había logrado Besay. Un grupo de jugadores del Arguineguín, perfectamente identificados por el colegiado del encuentro, la emprendieron a patadas y puñetazos con los valsequilleros junto al banquillo de estos.
que bonito sería que identificaran a cada uno de los participantes de esa asquerosidad y que no se les permitiese acercarse a un recinto deportivo de por vida.
Comentarios
Si jugaran al baloncesto sería una batalla canchal.
#1 Si fueran argentinos, también lo sería
que bonito sería que identificaran a cada uno de los participantes de esa asquerosidad y que no se les permitiese acercarse a un recinto deportivo de por vida.