Hace 10 años | Por Tartesos a online.wsj.com
Publicado hace 10 años por Tartesos a online.wsj.com

Contrariamente a saber popular de que los humanos son esencialmente egoístas, científicos descubren que el cerebro humano está diseñado para la generosidad. Donde antes sólo se especulaba sobre los orígenes del deseo humano para ayudar a otros, datos empiezan a llenar el vacío, descubriendo el funcionamiento del hardware biológico que posibilita el altruismo. Esto representa una nueva frontera científica, que podría permitir el desarrollo de terapias para personas con dificultad para generar empatía o que quieren mejorar su generosidad.

Comentarios

D

Que se pasen por cualquier sede de un partido de derechas si necesitan cobayas.