Sprinkles, una de las pastelerías más famosas de Beverly Hills, ha inventado una nueva forma de distribuir sus productos: a través de un cajero automático disponible las 24 horas del día. Las colas que se formaban frente a esta pastelería para conseguir una de sus famosas magdalenas eran kilométricas. Por ello, los dueños decidieron ofrecer a sus clientes sus famosos pasteles sin necesidad de esperar demasiado: mediante un cajero automático.
Comentarios
Si da magdalenas no es un cajero automático, sino una máquina expendedora.
Los cajeros dan dinero.