Hace 11 años | Por roybatty a theglobeandmail.com
Publicado hace 11 años por roybatty a theglobeandmail.com

En 2007, Michael Tkaczuk, propietario de la empresa Serrano Imports con sede en Toronto, trajo un cargamento de la valorada carne fresca de ibérico a Canadá. Este producto singular y altamente codiciado fue rápidamente acaparado por los chefs y gourmets de todo el país. Pero había una pega. Tal y como explica Tkaczuk, desconocía que el producto sufría un arancel del 100% de su valor. Traducción en http://tinyurl.com/ce9mk3p.

Comentarios

conversador

Los canadienses tienen que aprender de otros paises que ya hace tiempo que aceptan este producto. Y es que "del marrano hasta los andares"

D

El otro dia fui a un wok asiatico. 12 euros el buffet. Tenian un expositor de servicio de jamon. Jamon bien cortado a mano que la gente saqueaba a cada plato que cortaba al mejor estilo andaluz, un amable asiatico.
Apetecia mas que el sushi o cualquier otro plato. Vi incluso quien ocultaba las finas lonchas en el bolso.
Un jamon bueno de gusto y con sus vetitas y motas blanquecinas, tal cual como cualquier iberico. Pero no era iberico. La grafia oriental marcada en la piel de la pata negra delataba un origen lejano.