El fraude conocido ahora no solo afecta al propio «profesor» sino a los trabajos de cientos de asistentes y estudiantes que colaboraron con él de buena fe y que fueron quienes le han desenmascarado. Entre algunas de las conclusiones que Stapel avaló con sus falsas investigaciones figura la de que las personas que comen carne son más agresivas que los vegetarianos.
Comentarios
Qué cabrón, ese me lo creí.