Hace 14 años | Por --136875-- a ojocientifico.com
Publicado hace 14 años por --136875-- a ojocientifico.com

Robert Fitzroy, estudioso de la fisonomía humana y capitán del bergantín HMS Beagle, estuvo a punto de rechazar a Charles Darwin en su tripulación por la forma de su nariz. Fitzroy dudaba de que una persona con un apéndice nasal tan ancho y aplastado pudiera tener un carácter aventurero y soportar una travesía marítima tan larga. Al final el Capitán Fitzroy dejó de lado semejante prejuicio y aceptó al joven Darwin. Menos mal ya que dicho viaje le permitió desarrollar al naturista la teoría que sostiene que los seres vivos tienen un origen...