Varios son las dinámicas existentes que delimitan la creación de precios de los pisos en el mercado inmobiliario: los pisos de primera mano a la venta, los de segunda mano, aquellos que se hallan en construcción así como los vacíos en las grandes zonas urbanas del país. Sabemos que: • Los precios de los pisos alcanzaron su apogeo en el tercer trimestre de 2006 ; • Desde el tercer trimestre de 2006 los precios de los pisos en el mercado de segunda mano han bajado ya el 38%, por lo menos; • Los precios de los alquileres llegaron a su punto más al
Comentarios
#0 Los precios de los alquileres han bajado ya, desde su pico, alrededor del 42%
Eso no se lo cree ni el que lo ha escrito. En las grandes ciudades los precios siguen alto, entre otras cosas porque hay una gran demanda de personas que no pueden comprarse uno y optan por el alquiler. En casa tenemos dos pisos alquilados, los que teníamos de solteros mi novia y yo, y el suyo lo lleva alquilado a un nuevo inquilino desde hace año y medio, y el mío lo alquilé hace dos meses a 50 euros mas de lo que lo alquilé hace cinco años (no subimos nunca el precio en los 5 años de contrato).
Un amigo mío que tiene pisos también en alquiler, esta semana se le fue un matrimonio que se ha separado de unos de los pisos, y pensando que le costaría alquilar, lo bajó 100 euros: de 1000 a 900 euros. En tres días lo tenía alquilado.
Así que no son cosas que me cuentan, sino lo que veo de primera mano, y los precios de los alquileres siguen al mismo precio. Y el de los pisos, a mi que me gusta ir mirando los precios regularmente, no veo que hayan bajado mucho, al menos en Barcelona ciudad.
Pagar mas de 1200€ el m2 es una estafa, todo lo pagado de mas se lo han repartido:
- El concejal de urbanismo u otros del hay-untamiento que han alargado la mano para sacar cacho.
- El especulador del suelo que vende a precio superinflado
- El promotor sacando rendimientos obscenos
- El pasapisero que saca un 200% sin escriturar
- El particular que le saca "x mishone" a su mierda piso de segunda mano por tocarse las narices.