Cerca de cuatro mil personas tomaron las uvas este mediodía en Vilagarcía de Arousa (Pontevedra) para dar la bienvenida al 2010, una tradición que se remonta a 1998 cuando, por primera vez, se adelantó la despedida del año. El ayuntamiento reparte bolsas con uvas para favorecer la participación de jovenes y adolescentes.