Según el Programa Internacional para la Erradicación del Trabajo Infantil, de la OIT, muchos de los pequeños laboran durante horas y en condiciones peligrosas, y más de la mitad lo hacen en las peores formas de trabajo, como esclavos o en actividades ilícitas como el tráfico de drogas, la prostitución o los conflictos armados.
Cuando la necesidad primaria aprieta, son las propias familias las que tiran de ellos para no morir de hambre.
Para que tengan una buena educación, primero habría que equilibrar la riqueza en el mundo.
Es una pena, pero es la verdad.
Perdón, pero esto es una auténtica tontería. El mismo artículo reconoce que, en la mayoría de los casos, el trabajo infantil es necesario para el mantenimiento de las familias. Si los menores no trabajan, sus familias no pueden mantenerlos, y ahí sí que están expuestos a todo tipo de males, siendo el más inmediato de ellos el abandono. Después la calle se los comerá: drogas, prostitución, delincuencia.
La escuela no es una varita mágica, señores. Primero hay que respaldar a las familias.
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Cuando la necesidad primaria aprieta, son las propias familias las que tiran de ellos para no morir de hambre.
Para que tengan una buena educación, primero habría que equilibrar la riqueza en el mundo.
Es una pena, pero es la verdad.
Perdón, pero esto es una auténtica tontería. El mismo artículo reconoce que, en la mayoría de los casos, el trabajo infantil es necesario para el mantenimiento de las familias. Si los menores no trabajan, sus familias no pueden mantenerlos, y ahí sí que están expuestos a todo tipo de males, siendo el más inmediato de ellos el abandono. Después la calle se los comerá: drogas, prostitución, delincuencia.
La escuela no es una varita mágica, señores. Primero hay que respaldar a las familias.