Hace 11 años | Por nom a melchormiralles.es
Publicado hace 11 años por nom a melchormiralles.es

La lluvia le da al encuentro un matiz algo lúgubre y justificaba un gorro que cubría su cabeza. Le veo entrar raudo. Local fuera del circuito habitual de los políticos de fuste. Me pidió “cita discreta”. No quiere aparecer como fuente. Pero es que, además, “no pueden vernos”. Apariencia de cita clandestina. No había quedado con un delincuente. Era un hombre que habla con frecuencia con Rajoy, el presidente. “Si el jefe se entera de que hablo con periodistas estoy acabado”.

Comentarios

j

Nada que no sepamos.

Lo que si parece claro es que a Rajoy, además de caerse solo, le están poniendo más zancadillas desde dentro que desde fuera.

Nos queda una larga travesía por el desierto.