Hace 16 años | Por Tazarte a publico.es
Publicado hace 16 años por Tazarte a publico.es

Las crónicas medievales cuentan que la disentería fue uno de los mayores enemigos que los cruzados encontraron al invadir Tierra Santa. Para el investigador del Imperial College de Londres (Reino Unido), Piers Mitchell, esta explicación no bastaba. Experto en paleopatología y sobre todo en la medicina de las Cruzadas, este médico decidió rastrear los lugares donde aquellos caballeros pudieron haber enfermado, con el fin de rescatar cualquier resto que llevase a la identificación del patógeno responsable.