“Este proyecto se ha ejecutado por el Gobierno de la República Islámica de Afganistán en colaboración con el Gobierno de España PRT” dice un cartel así, escrito en español, y con las banderas de Afganistán y España, en la entrada de la escuela de Ludin, un pueblecito situado a escasos kilómetros de Bala Murghab.
El colegio tiene ahora noventa alumnos pero muchos más solicitaron inscribirse. “No los pudimos admitir porque no hay suficiente espacio, ni tampoco suficientes profesores”, argumenta Karim. La escuela cuenta en la actualidad con dos maestros, pero ninguno de los dos es profesional de la enseñanza y se dedican a hacer clase como una forma de conseguir unos ingresos suplementarios, aparte de lo que ganan como agricultores.
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El colegio tiene ahora noventa alumnos pero muchos más solicitaron inscribirse. “No los pudimos admitir porque no hay suficiente espacio, ni tampoco suficientes profesores”, argumenta Karim. La escuela cuenta en la actualidad con dos maestros, pero ninguno de los dos es profesional de la enseñanza y se dedican a hacer clase como una forma de conseguir unos ingresos suplementarios, aparte de lo que ganan como agricultores.
España ha ido a Afganistán a construir escuelas, ya, ya...