El adjetivo consistente español no significa lo mismo que el inglés consistent, es decir, congruente, coherente o consecuente. Sin embargo, en el lenguaje actual es muy frecuente su mal uso, sobre todo en textos traducidos del inglés.
#2 Sí, pero en el ejemplo que pone el autor, no hablamos de dos colegas hablando en la cola del cine, sino de una traducción, algo estudiado, y que debe ser metódico y lo más exacto. Por lo general las traducciones que se hacen al español son bastante malas, probablemente debido al poco dinero que se paga a los profesionales. Pero quizás influya que los profesionales escogidos, tampoco son ninguna maravilla.
#3 Ahí le has dado. Esas cosas pasan porque la mayoría de las veces las empresas, sobre todo las españolas, no quieren gastarse lo que cuesta un traductor profesional y encargan el trabajo a un "experto" en la materia, o subastan el proyecto al mejor postor en uno de esos maravillosos portales freelance y finalmente se lo endosan a alguien en la India por la cuarta parte del precio mínimo que cobraría un traductor local. Pero claro, tanto gastas, tanto obtienes... y luego nos llevamos las manos a la cabeza.
#4 Sobre todo en el periodismo deportivo, cuna de despropósitos lexicales y gramaticales.
#2 Cierto. Los idiomas están vivos. Pero ese argumento no puede utilizarse sistemáticamente para justificar un mal uso. Se trata de hablar con propiedad y decir exactamente lo que se quiere decir, y no otra cosa. El problema es muchos cumunicadores emplean constantemente términos erróneos hasta que al final acaban por imponerse.
La evolución de la lengua debe consistir en enriquecer no en confundir.
Comentarios
hasta que lo sea... los idiomas estan vivos por mucho que les moleste a algunos...
#2 Sí, pero en el ejemplo que pone el autor, no hablamos de dos colegas hablando en la cola del cine, sino de una traducción, algo estudiado, y que debe ser metódico y lo más exacto. Por lo general las traducciones que se hacen al español son bastante malas, probablemente debido al poco dinero que se paga a los profesionales. Pero quizás influya que los profesionales escogidos, tampoco son ninguna maravilla.
#3 Ahí le has dado. Esas cosas pasan porque la mayoría de las veces las empresas, sobre todo las españolas, no quieren gastarse lo que cuesta un traductor profesional y encargan el trabajo a un "experto" en la materia, o subastan el proyecto al mejor postor en uno de esos maravillosos portales freelance y finalmente se lo endosan a alguien en la India por la cuarta parte del precio mínimo que cobraría un traductor local. Pero claro, tanto gastas, tanto obtienes... y luego nos llevamos las manos a la cabeza.
#4 Sobre todo en el periodismo deportivo, cuna de despropósitos lexicales y gramaticales.
#2 Cierto. Los idiomas están vivos. Pero ese argumento no puede utilizarse sistemáticamente para justificar un mal uso. Se trata de hablar con propiedad y decir exactamente lo que se quiere decir, y no otra cosa. El problema es muchos cumunicadores emplean constantemente términos erróneos hasta que al final acaban por imponerse.
La evolución de la lengua debe consistir en enriquecer no en confundir.
Unos cuantos años más, y conseguiremos que ese sea su uso