La nueva investigación muestra que existe una cascada de información, donde las personas infieren que si un producto se agotó, debe ser bueno y por tanto también puede resultar deseable un producto similar que esté disponible. Además, los productos agotados hacen creer a la gente que también pueden estarlo los más parecidos a esos. El estudio ha sido conducido por Paul Messinger, profesor de la Universidad de Alberta, quien analizó la venta de numerosos artículos.
Comentarios
Si yo tuviera un supermercado, dejaría dos o tres huecos en el producto que más quiero vender...
Doy fe de que he comprado algunos artículos sobre los que me resultaba difícil elegir (por ejemplo, una botella de vino) si veía el estante con bastante espacio. Y doy fe de que eran de calidad.
Han descubierto la rueda...
No se, cuando voy a comprar algo determinado y no hay... me cabreo.
Doy fe de que he comprado algunos artículos sobre los que me resultaba difícil elegir (por ejemplo, una botella de vino) si veía el estante con bastante espacio. Y doy fe de que eran de calidad. -> Eres el Luisma, ¿verdad?