Los historiadores que han investigado la represión en la Valencia republicana durante la Guerra Civil habían oido hablar de ellas, pero nadie las había visto. Se trata de las fotografías que la Administración republicana del Cap i Casal ordenó tomar a los cadáveres de las víctimas de los paseíllos del llamado Terror Rojo. Hombres y mujeres asesinados por grupos de incontrolados por motivos ideológicos o religiosos, cuyos cuerpos eran abandonados en la calle. Las fotos están siendo vendidas en el rastro de los domingos a 20 Euros.
Comentarios
Nos preocupamos de la Memoria histórica de las plazas y calles y estas "pequeñas memorias" no han sido restituidas a sus legítimos propietarios.
Qué vergüenza, que uno venda en un rastro fotos antiguas como postales, y máxime de cadáveres.
Es acojonante la pérdida de documentos históricos que tenemos en España.
Y luego tantos bibliotecarios y archiveros en paro...