Hace 16 años | Por --18879-- a elmundo.es
Publicado hace 16 años por --18879-- a elmundo.es

"De niño, Klaus Schmidt solía pasar el tiempo en las cuevas de su Alemania natal, con la esperanza de encontrar pinturas prehistóricas. Treinta años más tarde, y miembro ya del Instituto Arqueológico Alemán, ha encontrado algo infinitamente más valioso: un complejo templo que casi duplica en antigüedad a cualquier cosa comparable en el planeta." Ver también http://www.elpais.com/articulo/reportajes/elpdomrpj/20060611elpdmgrep_4/Tes/ .