La Guardia Civil detiene en Madrid a dos ciberestafadores de elite que vivían a todo lujo: jets privados, suites, limusinas y grandes fiestas en Ibiza. Aquella mañana de mediados de junio, Fabbri bajó del avión privado como otras tantas veces, procedente de Valencia. Comenzó a cruzar la pista, a pie, en dirección a la limusina Hummer que debía sacarle del aeropuerto de Torrejón de Ardoz.
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hasta cuando los colombianos, siempre en actividades delictuales como las estafas