"...cada día me encuentro con casos durísimos: menores que no saben leer ni escribir, que no saben utilizar los cubiertos, sucios, con piojos, casi sin ropa; casos de jóvenes que cometen delitos porque sufren transtornos de hiperactividad y falta de atención; padres que lloran al ver a sus hijos en el banquillo de los acusados... En muchos casos el menor es víctima de su propia realidad..."
Hay quien defiende que los niños y adolescentes nacen delincuentes, quien afirma que sólo aprenden a comportarse dándoles de hostias...
Y luego está la realidad: la desatención, la falta de apoyo, de límites y educación, la indolencia (qué pereza corregirlo, qué pereza mantener el castigo...) ... Sigo pensando que un menor que delinque es una víctima (1) de sus padres (2) del sistema de SS/escuelas que no detectó el problema a tiempo y (3) de la sociedad que luego, tras contribuir a crearlo, lo rechaza.
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Hay quien defiende que los niños y adolescentes nacen delincuentes, quien afirma que sólo aprenden a comportarse dándoles de hostias...
Y luego está la realidad: la desatención, la falta de apoyo, de límites y educación, la indolencia (qué pereza corregirlo, qué pereza mantener el castigo...) ... Sigo pensando que un menor que delinque es una víctima (1) de sus padres (2) del sistema de SS/escuelas que no detectó el problema a tiempo y (3) de la sociedad que luego, tras contribuir a crearlo, lo rechaza.