José Val del Omar ardió. "Amar es arder decía porque amar es ser lo que se ama". Val del Omar amaba las máquinas y a las personas, y a ambas dedicó su vida, que la vivió como un impulso y una persecución sin descanso. Su herramienta fue el cine, que era su manera de escapar, decía, "del negro de los libros" hacia la luz. Relacionada: José Val del Omar, un genio adelantado a su época