Hace 12 años | Por keleb a ipsnoticias.net
Publicado hace 12 años por keleb a ipsnoticias.net

Para el keniata Collins Otieno, la llegada de un nuevo día es sinónimo de incertidumbre, pues al buscar en los basurales su sustento cotidiano se expone a graves infecciones que podrían costarle la vida. En los cuatro años que Otieno, de 25 años, lleva hurgando en la basura por las calles de Soweto, un asentamiento irregular de Nairobi donde hay muchos centros de salud no autorizados, vio a muchos colegas suyos morir o quedar incapacitados por heridas infectadas.