El Ayuntamiento de Málaga construye Inacua, un gran equipamiento acuático de 17 millones de euros con dinero público. Y después cede su gestión privada a la constructora Ferrovial por 15 años. En esas mismas instalaciones y en contra de la normativa, el grupo Moliere abre un lucrativo restaurante-lounge, Azul, que es diseñado por el arquitecto y ex gerente de Urbanismo del Ayuntamiento de Málaga. Estas instalaciones no tienen licencia para actuar como restaurante de cara al público, aunque lo llevan haciendo desde su apertura.
Comentarios
mangoneo, mangoneo. si es que alli donde hay un politico es imposible que brille la honestidad