Hace 15 años | Por damocles a usi.earth.ac.cr
Publicado hace 15 años por damocles a usi.earth.ac.cr

Mientras la fruta es consumida, la miraculina se esparce sobre toda la lengua y bloquea las partes que pueden reconocer el sabor ácido. En presencia de un alimento ácido, las moléculas de la miraculina activan la yema del sabor dulce. Esta yema engaña al cerebro con la ilusión de que ha probado algo dulce. Por eso, por los siguientes 30 a 60 minutos después de comer la fruta milagrosa, ningún alimento ácido como limones, limas o vinagre saben ácidos, sino que tiene una dulzura añadida.

Comentarios

damocles

En un capítulo de CSI:NY hay un capítulo dedicado a esta fruta. Mac después de consumir la fruta consigue masticar tranquilamente una cebolla y lo disfruta por el sabor dulzón que le ofrece su engañado sistema gustativo.

¿Por qué las madres no compran esta fruta? Asi los niños comerían cualquier cosa: sobre todo las odiosas verduras.

marcee

Ya se ha hablado de esta fruta antes: Synsepalum dulcificum, la Fruta Milagrosa



Y, de acuerdo a los resultados del paper... no es que parezca muy útil, la verdad.