Es curioso ver la importancia relativa respecto a otros temas que tienen los asuntos de la bicicleta en las secciones de opinión de nuestros queridos y odiados periódicos. Parece mentira que, en los momentos críticos en los que vivimos, la gente preste tanta atención a las pobres bicis. Esto es, sin duda, sintomático de que algo está ocurriendo y que nos tiene a todos muy preocupados. Pero mucho, para que toda esa gente se tome la molestia de escribir unas líneas tanto en contra como a favor...