Hace 14 años | Por Matroski a aquiestuveayer.com
Publicado hace 14 años por Matroski a aquiestuveayer.com

Jizo es una de las deidades más veneradas en Japón, ya que es el encargado de proteger el alma de los niños que aún no han nacido o de los que han muerto siendo muy pequeños, de las embarazadas y, curiosamente, también de los bomberos y de los viajeros. Según la tradición budista japonesa, nuestras almas han de cruzar el río Sanzu al morir, pero las de los niños, al no haber acumulado apenas experiencia, son incapaces de hacerlo por sí solas. Al llegar a la orilla, la anciana Datsueba les aconseja hacer montoncitos de piedras...