[c&p] La reina se hallaba encinta de dos meses. En mayo dio a luz una hija. Cuando se lo anunciaron a Luis XV, y puesto que sus dos hijas anteriores eran llamadas Madame Quinta y Madame Sexta, le preguntaron si la niña se llamaría Madame Séptima. El rey respondió: -No. Se llamará Madame Última. Y lo fue. A partir de entonces ya no ocultó su relación con madame de Mailly, lo que le valió el reproche del cardenal Fleury. Pero el joven monarca replicó: -He dejado en vuestras manos el gobierno de mi reino. Espero que al menos me dejéis a mi amante.
Comentarios
Esta es la parte de la historia que tendrían que enseñar en las escuelas. Fijo que los examenes aumentaban a 10
¡¡¡ Es mi amante y me la beneficio como quiero !!!
http://www.elmundo.es/papel/hemeroteca/1996/02/04/esfera/82694.html
"Antes de vestir a la reina, la dama de turno le hace una reverencia y le tiende la camisa. Pero si en ese instante entra en la habitación una dama de mayor rango, la operación se suspende y debe ésta hacer la reverencia y ofrecer la camisa. Así es frecuente que, en ese rato, la reina permanezca desnuda y tiritando para cumplir el protocolo."