El boom inmobiliario permitió a las economías irlandesa y española galopar por encima de la media europea. Tres años después del estallido de la burbuja, el negocio residencial de los dos países sigue deprimido y con interrogantes sobre su futuro. Sin embargo, mientras que los precios de los pisos en el país celta han corregido un 37%, los de España han caído la mitad.
Será porque hay quien está interesado en que el mercado de la vivienda no siga las leyes del mercado...
¿No hemos visto acaso esos políticos corriendo desesperados para abrazar los precios de la vivienda en sus caídas? ¡A costa de sus vidas! ¿Esos bancos cargados de morosos y de inútiles inmuebles, que se las arreglan para venderlos al mayor precio posible? ¿Esos especuladores que se atrincheran en su cabaña en el monte, con una escopeta y un cargamento de conservas y cervezas, dispuestos a esperar tiempos mejores o morir con las llaves en la mano?
...¿Cómo era eso de que el mercado se autorregula?
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Será porque hay quien está interesado en que el mercado de la vivienda no siga las leyes del mercado...
¿No hemos visto acaso esos políticos corriendo desesperados para abrazar los precios de la vivienda en sus caídas? ¡A costa de sus vidas! ¿Esos bancos cargados de morosos y de inútiles inmuebles, que se las arreglan para venderlos al mayor precio posible? ¿Esos especuladores que se atrincheran en su cabaña en el monte, con una escopeta y un cargamento de conservas y cervezas, dispuestos a esperar tiempos mejores o morir con las llaves en la mano?
...¿Cómo era eso de que el mercado se autorregula?