Publicado hace 12 años por --303142-- a bibliotecaignoria.blogspot.com

El abate de Baigné era músico. El rey Luis XI apreciaba sus cantatas y lo invitaba con frecuencia a su castillo de Plessis. Esto sucedía en tiempos del ministerio de Gaguin. El rey alzaba su copa. Pedía a Robert Gaguin que mezclara en su vino un poco de sangre, extraída de sus súbditos más jóvenes. Un día, en presencia de Gaguin, mientras el abate de Baigné instruía al rey acerca de la dulzura que le parecía propia de la música, el soberano le preguntó si era capaz de producir una armonía con cerdos.

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DenisDiderot

En la peli "Le Libertin", de Gabriel Aghion, sale un órgano hecho de cochinillos: