Hace 13 años | Por cd_autoreverse a lasprovincias.es
Publicado hace 13 años por cd_autoreverse a lasprovincias.es

Un juzgado de Valencia ha optado por una medida pionera: en este caso, el hombre se encontraba preso en la cárcel de Picassent. Las pasadas Navidades quedó en libertad tras cumplir su pena, pero la orden de alejamiento sigue vigente hasta 2014. Por ley, esta medida tiene que ser al menos un año superior a la pena de privación de libertad. En la práctica suele exceder considerablemente la pena de cárcel. El riesgo de que la mujer fuera agredida de nuevo, tal y como acreditó la Fiscalía de Valencia, era máximo.

Comentarios

Robus

Espero que le pongan la power balance... así, además, se verá humillado publicamente...

Coñas aparte, me parece una buena medida para evitar que el maltratador pueda acercarse a la victima y a la vez pueda volver a trabajar y a vivir en sociedad.

Ginger_Fish_109

El titular da a entender que habiendo cumplido su condena además se le ponía la pulserita. Algo que me parecería muy fuerte la verdad. Pero se le pone porque aún tiene una condena de alejamiento. Nada que objetar.