Mandarina está aprovechando la crisis económica para ahorrar costes. Según una serie de denuncias, uno de los principales proveedores de Telecinco, realiza pruebas y castings sin remunerar. Los redactores son llamados para castings y luego se quedan buena parte de la jornada realizando una serie de pruebas y trabajos propios de un contratado de la productora, incluso elaborando contenidos para futuros programas.