«Llevamos año y medio y esto no puede seguir así. Somos 170 familias las que vivimos del mercadillo y no podemos estar un día prácticamente sin vender nada», explica Enrique Lozano, portavoz de los vendedores ambulantes para justificar la petición de traslado del mercadillo de los martes a otro emplazamiento, puesto que, según asegura, desde que tuvieron que abandonar la plaza de la Constitución para asentarse en el Recinto Ferial las ventas han caído en picado.
Comentarios
Estarán indignados, no digo que no, pero...eso de levantarse en armas, ¿no es pelín sensacionalista?