Publicado hace 13 años por mencabrona a desdelaputrida.blogspot.com

Muchos actos jurídicos cotidianos se llevaban a cabo en base a los recuerdos de antiguos códigos, las costumbres o la memoria de antiguas sentencias. Una suerte de jurisprudencia no fijada por escrito que se usaba para posteriores decisiones. En tal contexto, los testigos representaban una pieza clave para aportar datos decisivos si surgía algún litigio en el futuro. Hacer que los niños presenciaran estos actos era una práctica habitual, ya que proporcionaban cierta garantía como testigos de larga duración. Para ayudarles a fijar el recuerdo...

Comentarios

mencabrona

“Manuelinho, fijo mío, sábete que aquestos corteses donceles facen acuerdo de trocar aquestas tierras por estos dineros ¿ves?”. Y cuando el pobre infante anduviera desprevenido ¡¡ZASS!! ¡Hostiazo en toda la jeta! El trauma grababa el momento en la memoria por muchos años.

Luego evolucionó y la torta se comenzó a soltar por cualquier cosa...