No es que ellos hayan cambiado. Es que los conocemos cada vez mejor. Chimpancés y gorilas pueden ser crueles, vengativos, xenófobos, calculadores, agradecidos. Comportamientos que antes creíamos exclusivos de los humanos. Hemos hablado con algunos de los principales expertos en primates. Y no dejan de sorprendernos.
Comentarios
Vaya, a ver si el mito aquel de que en el mundo animal solo hay bondad y que los humanos somos los únicos que podemos ser crueles va a ser falso!