Una excusa poco creible que, sin embargo, dejó de serlo totalmente el pasado martes, cuando la Casa Blanca hizo pública una nota oficial en la que dejaba claro que no había tanta prisa por cumplir en tan luctuoso acontecimiento con la poderosa monarquía saudí: su delegación oficial no se iba a desplazar hasta el país de Oriente Próximo hasta el día siguiente, cuatro más tarde que nuestro monarca.
Pues qué queréis que os diga, esta me parece una noticia realmente patética: primero porque parte de asumir que lo que haga Obama tiene que ser lo más correcto por narices. Segundo, porque si lo correcto es ir a dar un pésame 5 o 6 días después de la muerte, que venga Dios y lo vea... especialmente a un funeral musulmán (la costumbre islámica es que el entierro sea el mismo día de la muerte, el día siguiente como muy tarde). Y tercero porque si uno quiere no asistir a un acto, no hace falta irse hasta Arabia: basta con sufrir una oportuna indisposición.
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Pues qué queréis que os diga, esta me parece una noticia realmente patética: primero porque parte de asumir que lo que haga Obama tiene que ser lo más correcto por narices. Segundo, porque si lo correcto es ir a dar un pésame 5 o 6 días después de la muerte, que venga Dios y lo vea... especialmente a un funeral musulmán (la costumbre islámica es que el entierro sea el mismo día de la muerte, el día siguiente como muy tarde). Y tercero porque si uno quiere no asistir a un acto, no hace falta irse hasta Arabia: basta con sufrir una oportuna indisposición.
Menuda gilipollez...