El Arzobispo de Trento (norte de Italia), Luigi Bressan, ha ordenado interrumpir la colecta iniciada en una iglesia de la ciudad para ayudar a la comunidad islámica local a construir una mezquita donde puedan rezar los fieles musulmanes. El fraile capuchino Giorgio Butterini, que había pedido ayuda a los fieles de la iglesia de la Santísima Trinidad de Trento para construir el templo musulmán, declaró a los medios italianos que la decisión del prelado era "una desagradable sorpresa".
Comentarios
Es desagradable que no sea una sorpresa.
El fraile en cuestión será uno de esos pobres infelices que se creen lo que predican. El Arzobispo lo tiene más claro: hay que ser implacable con la competencia.
Son cosas del negocio.
#1 Ahí veo yo un pastor sano y un obispo canalla.