La empresa invertirá 31 millones en esta iniciativa que prevé poner en marcha la primera central en 2012, dos años antes de lo previsto. Las plantas serán el elemento central de un sistema de gestión ambiental de estiércoles y residuos alimentarios para la región; y servirán para obtener electricidad aprovechando la combustión del biogás producido por los purines del ganado y otros deshechos orgánicos. Se trata de una fuente de energía renovable y limpia, que además sirve para conseguir abonos de alta calidad...