El alma tal vez sea eterna, el contrato del nicho, no. Es una realidad con la que se dieron de bruces muchos zaragozanos que el día 1 de noviembre acudieron al cementerio municipal de Torrero, en la capital aragonesa, a honrar a sus muertos. Algunas lápidas lucían una pegatina con elmensaje: Columbario caducado. Pase por la oficina de administración del cementerio.
Comentarios
#3 Hombre, este tampoco tiene pinta de que vaya a ir mucho más allá...
Habrá un gasto más superfluo que el del cementerio?
Un poco antigua la noticia ¿no?
#1 Sale en el periódico de hoy...
Lo de tener donde caerse muerto es que es muy actual a la par que moderno.
#2 la envíe yo hace unos días, desde la página del Heraldo de Aragón, pero pasó sin pena ni gloria...