Publicado hace 14 años por --171278-- a desequilibros.blogspot.com

Los jesuitas siempre han tenido interés por la ciencia. Entre sus filas ha habido notables astrónomos y astrofísicos. Pero en 1896, el padre Frederick Odenbach del Colegio Jesuita de Cleveland, Ohio, desarrolló un interés por la ciencia de la meteorología. Parece que ésta no satisfizo sus apetitos científicos pues, en 1900, había reorientado su atención hacia la sismología. Ese año construyó un sismógrafo y comenzó a hacer observaciones. Tras trabajar durante algunos años, el padre tuvo una idea genial...