Hace 10 años | Por Muzai a nippon.com
Publicado hace 10 años por Muzai a nippon.com

En 2012, un ciudadano nepalí convicto en Japón por el asesinato de una mujer, que cumplió 15 años de prisión, fue liberado tras probarse su inocencia. En el centro de las condenas injustas se encuentran las "mikomi sōsa"(investigación dirigida a inculpar a un sospechoso de características previamente determinadas), una práctica policial que lleva a los agentes a no rectificar nunca una vez han fijado la dirección de sus pesquisas.

Comentarios

tul

es mas facil y rapido colgarle el muerto a un chivo expiatorio que buscar pruebas y condenar a los autenticos responsables, pero eso no solo pasa en japon

D

La respuesta está en que Japón no es Occidente y por ello nos cuesta entenderlo. Uno de los pilares del pensamiento occidental durante milenios, ha sido el cuestionar la autoridad, justamente lo contrario de lo que ocurre en Oriente. Si en Japón la autoridad representada por la policía, cree que eres culpable ¿qué es la realidad para poder contradecir esa afirmación?. Un asunto puramente cultural y como vemos, finalmente prevalecieron los hechos. Pero no nos sintamos muy "superiores", por siglos afirmamos que la generación espontánea era una realidad porque una autoridad, Aristóteles, así lo decía...