La decisión dependerá del balance final de 2011. Cuanto más déficit reconozca el nuevo Gobierno, más tendrá que reducir para llegar al 4,4% al final de 2012. El silencio del líder le ha permitido no mojarse mucho, pero varias personas de su confianza van dejando caer sospechas de que a final de año será del 8%, el objetivo comprometido con la Unión Europea para 2011 fue del 6%.