La situación de la pequeña jirafa, que nació hace un par de meses en Bioparc Valencia, mejora. Su estado evoluciona bien aunque lentamente, ya que todavía no alcanza un peso por encima del nivel deseado. Desde su nacimiento, la madre la rechazó por ser primeriza y, por tanto, los cuidadores del parque han sido los encargados de criarla.