Los Laboratorios Bell, de la entonces todopoderosa ATT, encargo al ingeniero Karl Jansky que hiciera un estudio sobre los ruidos radioeléctricos que pudieran afectar a las comunicaciones trasatlánticas de radio. Para hacerlo instaló un conjunto de antenas direccionales que se podían desplazar. Estuvo trabajando un año observando los distintos ruidos que le llegaban y descubrió que había un ruido de fondo, no demasiado fuerte, que estaba ahí permanentemente. El ruido provenía de las estrellas.
Comentarios
#1 Es de las cosas más maravillosas de la astronomía. Cuando miramos lejos vemos el pasado.
Lo que recibimos ahora se emitió hace 26 000 años.
WOW!!