El Rainbow Warrior, buque insignia de la organización ecologista Greenpeace, se encuentra hoy frente a las costas de Altea, Alicante, para exigir la paralización inmediata de las obras ilegales del puerto deportivo “Luis Campomanes” que lleva a cabo la empresa Marina Greenwich SA para ampliar esta instalación.
Verguenza debería darnos que venga una ONG a exigir que cumplamos NUESTRAS propias leyes... se entiende que los encargados hacerlas cumplir estan pringados... de sal, digo, ...en la playa.
Comentarios
Verguenza debería darnos que venga una ONG a exigir que cumplamos NUESTRAS propias leyes... se entiende que los encargados hacerlas cumplir estan pringados... de sal, digo, ...en la playa.