Si consideran que los blogueros leales a la Revolución son “mal-pagados”, quiere decir que no lo hacen por dinero, sino por principios y por ideas en las que creen, algo muy loable y meritorio en los tiempos que corren, aunque quizá no para quienes tienen otros tipos de “razones” y “motivaciones” para escribir, como el autor del artículo de Encuentro.