Hace 11 años | Por kikuyo a internacional.elpais.com
Publicado hace 11 años por kikuyo a internacional.elpais.com

Relato de la violencia de las bandas al servicio del narcotráfico en Medellín (Colombia), que el año pasado dejó 538 muchachos asesinados. Nadie ha dicho que los perros lloren de pena. Pero los ladridos que Laika lanza como si fueran reclamos sobre el ataúd gris jaspeado de Julián Andrés Taborda Nanclares tienen que significar algo...