Nadie en aquella región al sur de Colorado quiso hacerse cargo del moribundo. Un hombre de Billy el Niño había resultado herido en un duelo y ninguno de los cuatro médicos de Trinidad, por entonces un pueblo perdido en la frontera del Oeste, quiso mover un dedo por él.
La historia de la iglesia* está llena de la corrupción de los mejores y superada, a su vez, por miles/millones de historias de abnegación/sacrifcio/amor de gente de corazón. Que las historias de los corruptio optimi pessima no tapen las verdaderas historias
*Como las del resto fuera de la iglesia. Nadie tiene afortunadamente la exclusividad en la bondad.
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La historia de la iglesia* está llena de la corrupción de los mejores y superada, a su vez, por miles/millones de historias de abnegación/sacrifcio/amor de gente de corazón. Que las historias de los corruptio optimi pessima no tapen las verdaderas historias
*Como las del resto fuera de la iglesia. Nadie tiene afortunadamente la exclusividad en la bondad.